Ajustes en la Sucursal de Ajalvir


COMENTARIOS DE NUESTROS LECTORES


Carta de 1 de Noviembre de 2009



Carta a los Cuerpos de Ancianos
Ajustes en la Sucursal de Ajalvir (Pág. 1)
Ajustes en la Sucursal de Ajalvir (Pág. 2)
Ajustes en la Sucursal de Ajalvir (Pág. 3)

La carta que con fecha 1 de noviembre de 2009 escribió la corporación oficial de Testigos Cristianos de Jehová en España, carta que se leerá a las congregaciones en la primera semana de enero del 2010, intenta excusarse o dar explicaciones sobre la actuación del cierre de la imprenta de Ajalvir y el traslado de la edición de revistas a la sucursal de Londres. La carta señala varias ventajas que supuestamente benefician a los testigos de España. Leemos en la página 2 de la parte de la carta a las congregaciones:

“¿Hay alguna ventaja de ser cliente de una sucursal más grande, en vez de trabajar por nuestra cuenta?”

Comentario inicial: ¿Para qué se necesita una sucursal más grande? ¿Es que la de Ajalvir no es lo suficientemente grande, después de los millones de dólares que costó, procedentes de los paupérrimos bolsillos de tantos trabajadores que a duras penas podían ganar lo suficiente para sus familias? ¿Puede ser más grande que la de Ajalvir una sucursal que tiene que atender ahora las multimillonarias impresiones de varios países europeos? ¿Cuántos kilómetros cuadrados de extensión precisaría tal sucursal para poder atender a tantos con la misma maquinaria impresora?

“Es posible señalar varias ventajas importantes. He aquí cuatro ejemplos. 1) Hay en existencias una gran variedad de publicaciones, disponibles inmediatamente. Con un almacén más pequeño hay que pedir ciertos artículos no muy comunes a otras sucursales y esperar mientras llegan”.

Comentario al punto 1) Repetimos lo ya comentado. ¿Pueden ser más grandes que los de Ajalvir los almacenes de Londres, que tienen que guardar millones de piezas de literatura en diferentes idiomas? ¿Tan pequeño es el almacén de Ajalvir que no caben las publicaciones editadas en su mayor parte en castellano? Si Londres imprime, supongamos en solo ocho o diez idiomas, los almacenes correspondientes irán en proporción a tales idiomas, por lo que ocuparán una extensión increíble, que no parece que se corresponda con la realidad que constatamos al observar la amplitud de la sucursal londinense. Tengamos presente que Londres editaría en inglés, español, francés, italiano y algunos más, que son los idiomas mayoritarios en Europa. En alemán, entendemos que su impresión se hará en Alemania. ¿De verdad que los almacenes de Londres para contener la literatura en solamente los cuatro idiomas principales pueden ser más grandes cada uno de ellos que los de Ajalvir? Por otro lado, deducimos de la carta que el almacén de Ajalvir continuará funcionando, ya que leemos que “sí tendremos (en el almacén) algunas revistas para reponer en caso de extravío de un envío”. No sabemos cuántos millares de revistas serán “algunas revistas”. Pero, si tienen que almacenar revistas para casos de extravío, lo mismo es cierto de los millares y millares de libros y folletos. Al final, resulta que el almacén de Ajalvir estará tan lleno como antes de dar carpetazo a la imprenta.

“2) Las grandes sucursales impresoras emplean maquinaria más moderna y sofisticada. Como nos daremos cuenta en los próximos meses, son capaces de producir publicaciones de mejor calidad y de mayor atractivo para las personas en el territorio”.

Comentario al punto 2). Maquinaria más moderna y sofisticada. Cierto. Londres la tiene. Pero, ¿por qué no se ha comprado maquinaria más moderna y sofisticada para Ajalvir? Muy sencillo: porque todo el dinero está invertido en inmuebles y no hay efectivo para comprar maquinaria, aparte de que las contribuciones han bajado drásticamente en toda España, lo mismo que en todo el mundo. Ni siquiera había presupuesto para mantener la obsoleta rotativa de Ajalvir. En la misma carta, unos párrafos más arriba, lo aclara: “La necesaria renovación de maquinaria representa una inversión mucho mayor que antes”. Por eso ha de aprovecharse la maquinaria moderna de Londres, capacitada para mayores tiradas en menos tiempo. En cuanto a que las publicaciones sean de mejor calidad, eso es discutible, ya que el material, que no puede ser más barato, sigue siendo el mismo. La maquinaria de Londres imprime con la misma calidad que la de Ajalvir y la de cualquier otra sucursal, a no ser que las máquinas de las últimas estén estropeadas. La ventaja está en la velocidad y en el ahorro de tiempo al imprimir, cortar, encuadernar y empaquetar. Nada más. Con respecto a la maquinaria de Ajalvir, se aseguró en principio que sería trasladada a Alemania para imprimir allí. Se ha demostrado que esto es falso, sobre todo porque la maquinaria ajalvireña se obligan a desmontarla como chatarra, ya que ni en los países tercermundistas la quieren y, además, sale más económica una máquina nueva.

“3) La rotativa de Londres funciona con menos personal, pero produce casi tres veces más que la nuestra y las revistas salen contadas, empaquetadas y con las señas del destinatario. ¿El resultado? Sin intervención manual, se eliminan los errores”.

Comentario al punto 3). Lógico. Con maquinaria más sofisticada, a la vez que se triplican las tiradas, se reducen proporcionalmente los tiempos, los costos de material y el personal. Y al haber menos personal, se reducen los costes de seguridad social. Lo de “sin intervención manual, se eliminan los errores” puede también aplicarse al Cuerpo Gobernante. ¿No supone la elaboración de las doctrinas una intervención manual constante? ¿Implica errores esta intervención manual? Si no hubiera errores, ¿se cambiarían las doctrinas?

“4) Una importante economía de operación debido a producir en grandes cantidades. Además, en algunos países como el Reino Unido las condiciones fiscales son más favorables, lo que supone un importante ahorro para la obra mundial”.

Comentario al punto 4). Aquí está la madre del borrego. Este cuarto punto es el que nos dice el verdadero motivo de operar en Inglaterra y no en España. Está claro que producir literatura en grandes cantidades resulta más económico. Pero lo más importante es que las condiciones fiscales son para una entidad religiosa más favorables en el Reino Unido que en España. Ello supone un importante ahorro para la obra mundial. ¡Naturaca! Pero, ¿el ahorro es en realidad para la obra mundial o para que haya más dinero para destinar a inversiones inmobiliarias?

Resumen). En último extremo, ¿cuál pudiera ser la razón de tan fulminante huída al país de los hiperbóreos? No parece ser la de atender mejor los intereses de ningún reino ni la de simplificar los asuntos. La única razón que se baraja es la económica. La maquinaria se ha quedado para el arrastre. Si la marcha fuera por motivos de atender intereses del reino, ¿por qué no se mudaron antes a la sucursal de Londres, mientras la maquinaria de Ajalvir funcionaba a pleno rendimiento? ¿No era también entonces más rápida la maquinaria de Londres?

Por otro lado, ¿quién está considerada en España como religión, la Sociedad Watch Tower o la asociación de Testigos Cristianos de Jehová? La segunda. Por eso en las cartas que se envían a las congregaciones no figura actualmente (o no debería figurar) el membrete ni el emblema de la SWT, ni tampoco debe figurar en los salones del reino. Tampoco figura en España el nombre de la SWT como editor de las revistas, las cuales son editadas hasta diciembre del 2009 por los testigos de Jehová y no por la SWT, según leemos en el pie de imprenta de las revistas. Desde enero se publican en Inglaterra por la SWT británica, no por los testigos de Jehová. ¿Será que en España la SWT, al no estar considerada como religión, estaba sujeta a tributación por la edición de literatura y por eso la misma figura a nombre de Testigos de Jehová? ¿Qué pasó ahora? ¿Pueden los testigos de Jehová a partir del 2010 imprimir sus revistas en España sin estar sujetos a tributación fiscal? ¿Se dio cuenta el fisco de que las revistas las imprime en realidad la SWT y no la reconocida religión TJ, que está exenta de impuestos? ¿Fue ése en realidad el motivo principal de la estampida hacia un país donde “las condiciones fiscales son más favorables”?

Están tan amalgamados los conceptos de las entidades de “Sociedad Watch Tower, Testigos Cristianos de Jehová y Cuerpo Gobernante”, que los gobiernos no saben qué pintan las tres corporaciones juntas a la hora de reconocer a una de ellas como religión en el país respectivo. Así, en España se reconoció como religión a los TJ, pero no a la SWT ni al CG. El testigo de a pie reconoce subconscientemente que aquí hay una trinidad de un solo dios o tipo de adoración con tres personas o corporaciones distintas. Sin embargo el cristianismo primitivo no tenía tal complicación de entidades para ejercer su cometido.


ATRÁS