Octubre de 2000 Mi querido amigo: No tratándose de un individuo real que responda a la identidad de una persona concreta, sino viendo en usted al representante imaginario de una supuesta familia, la de los Atalayado, me permito no obstante personificarle y tratarle en calidad de integrante individual de esa familia. Considero pertenecientes a la familia de los Atalayado al grupo real de los influenciados por La Atalaya al grado de haber perdido peligrosamente una parte importante de la personalidad propia. A usted, pues, amigo don Juan, le elijo como destinatario de estas letras, en representación de algunas de las personas concretas que en una u otra ocasión se han dirigido a nosotros, quienes hemos dejado de pertenecer, de una u otra manera, a la comunidad de los testigos de Jehová y exponemos nuestro punto de vista y las razones que nos asisten. Por supuesto, a toda su familia, la de los Atalayado, recomiendo la lectura sincera de esta carta, pidiendo un esfuerzo de comprensión en la certeza de que, por haber experimentado la situación que ustedes viven, yo les comprendo, pero entiendo que a todos se nos pide algo más, hacer uso de nuestros propios recursos, nuestras facultades de raciocinio. Romanos 12: 1-2. En primer lugar, permítame mostrarle mi respeto que, como personas (en cuanto que, en la práctica, usted es el representante de un colectivo de personas reales), todos merecemos. Y, aunque usted no se llame Juan y ni tan siquiera sea una única persona, sí que cada una de esas personas a las que me he permitido singularizar en "Juan", merecen el reconocimiento humano en la personalidad concreta de cada uno de los que, en mi opinión, forman parte de la familia de los "Atalayado". Debo, no obstante, señalarle que usted ha renunciado a una buena parte de la dignidad que le corresponde, por lo que me es muy difícil identificarle como individuo fuera de las características que los ha llevado a constituirse en una familia muy especial, los "Atalayado". Eso es así, porque cuando intenta expresarse no es capaz de sustraerse al programa de sus mentores, "Los Atalaya", y repite una y otra vez sus instrucciones, sus expresiones, sus palabras, como si fuese usted un monigote de trapo hábilmente manejado por una mano diestra que, adueñada absolutamente de su persona, le ha moldeado una nueva personalidad, la de los "Atalayado". Cuando usted escribe y dice las cosas que dice, uno advierte enseguida la estructura de un orden mental implantado por La Atalaya. En este caso La Atalaya es tomada como representante máximo del conjunto de publicaciones de la Sociedad Watch Tower que considero ha moldeado de esa manera su mente, cerrando un círculo que, de momento, usted es incapaz de romper. En ese ordenamiento están todos los elementos necesarios para la creación de una persona manipulada, inclusive la amenaza y hasta la coacción por la ruptura del mismo. Dicho esto, procedo a contestarle a algunas de "sus brillantes" argumentaciones, citando de paso, el punto concreto del programa en donde (páginas de La Atalaya) las mismas se hallan registradas. Pongo entre comillas y resalto la esencia de sus alegaciones que creo que recogen lo fundamental, aquello en que convergen los mensajes recibidos en las diferentes ocasiones. Los retoques se deben exclusivamente a la necesidad de sintetizar, pero las expresiones clave son exactas. 1.- "Lo que he leído de ustedes lo considero erróneo y una falta de lealtad a Jehová Dios". Permítame significarle que le han confundido peligrosamente. Por una parte usted no suele señalar los supuestos errores a los que alude y aportar el razonamiento bíblico correspondiente y, por otra, confunde lealtad a Jehová con lealtad a la organización que afirma representarle, la Sociedad Watch Tower. Y precisamente hay motivos más que suficientes para abandonar la sumisión a dicha sociedad debido a sus evidentes errores que, en lugar de acercarnos a Dios, nos alejan de su camino. Examine sin complejos la información que lee y que, por discrepar de aquella a la que está habituado, la califica de errónea. Basta con leer un poco la Biblia con independencia de las publicaciones de la Sociedad para darse cuenta enseguida de la profunda divergencia en los caminos. ¿Hace eso habitualmente o es usted un esclavo de la literatura con escaso tiempo para considerar Las Escrituras? La Sagrada Escritura lleva a Cristo y a someterse a su yugo suave. Las publicaciones de la Sociedad Watch Tower conducen a la esclavitud al mal llamado "esclavo fiel y discreto" y la pesada carga que éste pone en las espaldas de los demás. Pero, en efecto, usted tiene profundamente grabado en la mente su obligación de ser leal a la organización Watch Tower, cosa que las publicaciones le identifican constantemente con la lealtad a Dios. Aquí tiene una muestra: «El denominador común es la lealtad. El anciano trabaja lealmente para servir al rebaño de Dios; los padres asisten lealmente a las reuniones de la congregación; la hermana apoya lealmente a los ancianos. (Hebreos 10:24, 25; 13:17; 1 Pedro 5:2.) En efecto, en todos los aspectos de la vida vemos a los adoradores de Jehová resueltos a servir lealmente con Su organización». (La Atalaya del 1 de agosto de 1997, página 8, párrafo 2). «Podemos esperar que Satanás intente socavar nuestra lealtad a Jehová y a Su organización terrestre». (La Atalaya del 1 de agosto de 1997, página 8, párrafo 3). Precisamente el título del artículo Servicio leal con la organización de Jehová comunica adecuadamente la idea que, con la repetición suficiente a lo largo del tiempo, da como resultado la identificación de una organización, la Sociedad Watch Tower, con el pueblo de Dios y las publicaciones de la misma con las "provisiones" divinas. El contenido del artículo confirma lo que le digo. Invariablemente el servicio y la lealtad a Jehová conlleva necesariamente la inclusión de la Organización, de la misma manera que cuando estimulan al estudio de la Biblia incluyen inseparablamente "las publicaciones" de la Sociedad con lo que, en la práctica, prevalece la Organización sobre la adoración libre y fiel a Dios, y sus publicaciones sobre la Sagrada Escritura. Lea estos ejemplos: «También hemos de ser leales al "esclavo fiel y discreto" y los medios que utiliza para difundir el "alimento [espiritual] al tiempo apropiado" (Mateo 24: 45). Leamos sin demora la información que se da en La Atalaya y las demás publicaciones». (La Atalaya del 15 de agosto de 2000, página 28. «El estudio diligente de las Escrituras con la ayuda de las publicaciones cristianas es un estímulo para la vigilia espiritual». (La Atalaya del 1 de marzo de 1997, página 17) «Solo el discernimiento espiritual, que se consigue mediante el estudio de la Palabra de Dios con la ayuda de las publicaciones suministradas a través del "esclavo fiel y discreto", nos ayudará a seguir un proceder apropiado en la vida». (La Atalaya del 15 de marzo de 1997, páginas 15-16) «Para adquirir discernimiento, tenemos que orar y estudiar la Palabra de Dios valiéndonos de la iluminación espiritual que nos brindan las publicaciones del "esclavo fiel y discreto"». (La Atalaya del 1 de marzo de 1997, página 18) 2.- "No deben olvidar que estamos en la única organización aprobada por Jehová hoy". Ha tenido muchas oportunidades de leer eso mismo en expresiones similares y se le ha inculcado constantemente la exclusividad del colectivo influenciado por la Sociedad Watch Tower como una organización dirigida directamente por Dios. Le cito como ejemplo unas frases de La Atalaya del 15 de enero de 1995, página 13 y párrafos 13 y 14, en donde podemos leer: «Ser parte de la única hermandad internacional que Dios aprueba también es una fuente de gran gozo». «Pero estas pruebas deben acercarnos unos a otros y darnos un sentido de unidad como parte de la única organización verdadera que Dios tiene en la Tierra». En la Sociedad Watch Tower conocen muy bien el valor de la repetición de las ideas y los conceptos para su implantación en la mente de las personas. Es un recurso que utilizan sin cesar. Y han tenido enorme éxito en sembrar en la mente de millones de personas unas ideas extrañas al contenido de la Sagrada Escritura como si fueran lo fundamental y la esencia de la misma. Quizá la principal de ellas es que unas determinadas personas son el conducto a través del cual ha de fluir necesariamente la información de tipo espiritual, ya que afirman haber sido comisionados y nombrados para ello. Quienes aceptan eso llegan a una situación de rechazo de todo lo que (en sentido religioso) venga de otra fuente. Nadie, salvo esas personas, está autorizado para impartir doctrina y enseñanza bíblica. Nadie que esté fuera de su influencia puede formar parte del pueblo de Dios. Ello conlleva la dependencia absoluta del grupo que promueve esa idea. A pesar de todo, el repetir mucho algo falso no lo hace verdadero. Y ese es el caso, querido Juan, de la organización que usted considera como la única aprobada por Dios. Toda la evidencia va en sentido contrario. La Sociedad Watch Tower se ha visto envuelta en un mensaje profético continuo al que le ha asignado el apoyo divino que ha resultado absolutamente falso una y mil veces. Su descrédito en ese sentido únicamente es ignorado por los integrantes de su familia, los Atalayado. Ello es así debido a que la condición de "atalayado" impide ver las cosas en la situación objetiva de las mismas. 3.- "Los errores se deben a la imperfección humana. Y Jehová enderezará los asuntos a su debido tiempo, no cuando ustedes lo deseen, proporcionando nuevo entendimiento para enderezar los asuntos. Deberían haberse mantenido al paso con la Organización de Jehová". Estoy de acuerdo en que los errores se deben a la imperfección humana, pero la persistencia en los mismos y el darles la vuelta (sin rectificarlos normalmente, como el caso de "la generación que no pasará") para presentarlos como aciertos y pasos progresivos en el esclarecimiento de la verdad es mala voluntad. En todo caso, esa manera de razonar unida a la constante afirmación de que el fin es algo inminente es bastante contradictoria. El fin de este "sistema de cosas" tendría que haber ocurrido hace mucho tiempo en la opinión de los responsables de la Sociedad Watch Tower. Han señalado a varias fechas para el mismo así como a épocas concretas en las que esperarlo. Eso ha sido así desde el siglo XIX cuanto C.T. Russell dio comienzo a su movimiento religioso. La obsesión por el fin ha sido y continúa siendo una constante. Actualmente se interpretan pasajes bíblicos de una manera diametralmente opuesta a como se han explicado en el pasado, de tal manera que casi no hay doctrina que no haya sufrido varias transformaciones. De manera que ese "debido tiempo" para enderezar los asuntos nunca llega definitivamente. Así que largo me lo fiáis. Es incompatible con esa "inminencia" del fin. Por lo demás, la doctrina fundamental quedó escrita en la Biblia. Tanta explicación, tanto cambio, tanto "punto nuevo" y tanto "nuevo entendimiento" únicamente tienen justificación cuando, como es el caso, se mantiene un "cuerpo de doctrina" propio, ajeno a la Sagrada Escritura por mucho que de ella se cite. La realidad muestra que el viejo conocimiento sobre una doctrina lo sacó a la luz la propia Organización. La misma que con el tiempo se encarga de desprenderse de ese "entendimiento" para suplir otro distinto al que denomina "nuevo entendimiento. Es en ese proceso en el que, aplicado al conjunto de doctrinas que la Sociedad Watch Tower sostiene, se llega a la denominada "verdad actual", concepto por el que la Sociedad denomina al conjunto de sus doctrinas en la "versión" más reciente. Precisamente para justificar todo paso que implica "nuevo entendimiento" se cita Proverbios 4: 18 que nada tiene que ver con algo así. Es simple cuestión de leer con detenimiento los textos y encuadrarlos en su debido contexto. Como le he dicho antes, leer la Biblia prescindiendo de las publicaciones. Que yo sepa, ni yo ni nadie tiene interés alguno en marcarle a Jehová el momento apropiado para que actúe. Aceptamos su propósito y su voluntad sin preocuparnos en demasía por ese asunto. Sencillamente tratamos de estar preparados llevando una vida digna. Usted, amigo Juan, sabe perfectamente que la Sociedad utiliza ese recurso de que "Jehová arreglará los asuntos a su debido tiempo" en infinidad de ocasiones y en referencia a asuntos diversos. Tan recientemente como el pasado mes de septiembre, La Atalaya traía a consideración el artículo MOSTREMOS UNA ACTITUD DE ESPERA. Aparte de acudir a personajes precristianos y a tiempos superados por el cristianismo y dejando a un lado las contradicciones con otros artículos, en ese artículo puede encontrarse el tácito reconocimiento del cansancio mental por la interminable espera a la que la Sociedad Watch Tower ha sometido a sus seguidores como algo que ya se toca con la mano, así como una velada amenaza para quienes puedan no compartir su criterio y su actuación. Esas cosas las encontramos en los párrafos 8 y 10 de la página 13: «Quizá algunos se desanimen al pensar que después de muchos años de servicio fiel tal vez no lleguen a contemplar el 'día de Jehová, grande e inspirador de temor’». «Con todo, no se percataron de que el espíritu de Jehová impulsa al esclavo fiel y discreto a hacer las modificaciones a Su debido tiempo, no cuando a nosotros puedan parecernos necesarias». Echan la culpa a otros cuando el caso es que los responsables de proponer expectativas inmediatas, a muy corto plazo, son los dirigentes de la Sociedad Watch Tower. Su pecado está en no reconocer su responsabilidad en primer lugar y, sobre todo, en autoproclamarse depositarios de los designios divinos para las modificaciones, para hacer y deshacer a su antojo. Los errores son cometidos por hombres y éstos deben reconocerlos, rectificar y pedir disculpas a aquellos a quienes han extraviado. Eso adquiere especial interés cuando se constata la persistencia en el error y la obstinación en utilizar métodos muy estudiados para encubrirlo. Disfrazar la realidad con otras palabras que involucran al propio Jehová es presunción, jactancia y falsedad. Pero voy a recordarle otro ejemplo que recojo de La Atalaya del 1 de diciembre de 1997, citando porciones de las páginas 30 y 31. El asunto en este caso es la queja, pero contiene los elementos clave que desean grabar en la mente del lector. El esquema es siempre el mismo: recurrir a ejemplos del pasado en los que hay envueltos personajes directamente comisionados por Dios y apropiarse unas atribuciones semejantes a las de aquellos. Finalmente recurren a la espera de que sea Jehová el que arregle los asuntos a su tiempo, pero siempre serán ellos los "autorizados" y los responsables de encargarse de llevarlo a la práctica. Considere estas frases: «Quejarse directamente de Jehová o de cualquiera de sus provisiones es particularmente grave». «¿Se dio cuenta de que en los ejemplos anteriores las quejas se presentaron con una actitud apropiada y ante la autoridad que correspondía?» «Conviene tener presente que algunos asuntos sencillamente tendrán que esperar a que Dios los corrija a su debido tiempo». «Ahora bien, no debería esperarse que todas las quejas tuvieran un final feliz. El sabio rey Salomón observó con realismo: "Lo que se hace torcido no se puede enderezar". (Eclesiastés 1:15.) Conviene tener presente que algunos asuntos sencillamente tendrán que esperar a que Dios los corrija a su debido tiempo». A todo ese manejo en manos de los responsables de la Sociedad Watch Tower, aunque en su lugar ponen a Jehová como el responsable último, lo considera usted como "mantenerse al paso con la organización de Jehová", una expresión acuñada por la Sociedad Watch Tower y que le sirve sobremanera para dar legitimidad a todo tipo de cambios doctrinales y mantener al mismo tiempo su dominio sobre los testigos. Por supuesto, se trata también de un recurso repetido y utilizado por largo tiempo que carece de justificación bíblica. Considere esta información escrita en La Atalaya del 15 de marzo de 1991, páginas 12-14: «Si usted es testigo de Jehová, ¿se mantiene al paso con la organización visible de Dios?» «Los siervos de Jehová tienen una rutina excelente mediante la cual adelantan espiritualmente. Es una rutina de efectuar estudio bíblico personal, asistir a las reuniones de congregación, predicar las buenas nuevas del Reino con regularidad y reflejar las cualidades que caracterizan a la organización celestial de Dios. Esa rutina les permite mantenerse al paso con la guía que da la organización celestial de Jehová asemejada a un carro». De manera que esa "rutina" tiene en la práctica un sentido de rutina real muy diferente al significado que La Atalaya le atribuye. Todo lo que organiza la Sociedad Watch Tower (transmisora terrestre de la guía de la organización celestial de Dios) adquiere carácter trascendental en su integridad, de tal manera que el hecho de faltar a una sola reunión es algo grave. En la realidad todo es rutinario y llega a hacerse mecánicamente. Eso sí, es la forma de llevar el paso, no de la congregación de Dios, sino de las actividades organizadas por la Sociedad Watch Tower. Es la manera de no despegarse de la participación en todo aquello que doctrinalmente y en la dedicación del tiempo disponible interesa a la Sociedad. Es, en definitiva, mantenerse al paso que ella marca. 4.- "Ustedes se están poniendo en el lugar que corresponde a la organización terrestre de Jehová. Si Armagedon viene mañana ¿No serán contados entre los opositores a Jehová? Eso ¿qué es exactamente? ¿Un deseo? ¿Una amenaza? Nosotros efectivamente no somos nadie, salvo seres humanos creados por Dios (lo que no es poca cosa) que deseamos servirle lo más fielmente posible y, por tanto, no deseamos que nadie nos extravíe. Nuestra dignidad nos viene dada por ser personas humanas, constituidas a imagen y semejanza del creador, hijos de Dios de pleno derecho por medio de la fe en Jesucristo y no meramente una "clase" secundaria. Pero cuando usted habla de la organización de Jehová, cosa que le han enfatizado hasta el hartazgo en La Atalaya y en otras publicaciones, usted está atribuyendo a otros (los dirigentes de la Sociedad Watch Tower) aquello que ve como algo criticable en nosotros. Cristo es exclusivamente el cabeza de la congregación cristiana, la iglesia de Dios. Él conoce a sus ovejas, quienes componen su iglesia. En ella no hay distinciones preestablecidas. Hay personas que pueden ayudarnos a entender mejor el propósito de Dios de acuerdo a su esfuerzo y su conocimiento de la Sagrada Escritura. Esas personas merecen respeto y pueden ejercer la autoridad moral que merecen, pero nunca lo podrán ser quienes se atribuyan "exclusividad", descartando a otros, en base a la afirmación de que ellos, tan sólo ellos, han sido nombrados para dar "el alimento apropiado a su debido tiempo". El registro histórico que ha dejado tras de sí la Sociedad Watch Tower muestra por añadidura la falsedad de sus enseñanzas cambiantes y la divergencia con los caminos y la voluntad de Dios. Eso demuestra que no ha sido "alimento espiritual" sano y tampoco ha sido dado a "su debido tiempo", sino caprichosamente. Me gustaría, antes de terminar, que diera consideración pausada a estas palabras tomadas de las páginas 10 y 11 de La Atalaya del 1 de marzo de 1997. Las ideas equivocadas han resultado en desilusiones; pero no pensemos que el día de Jehová está muy lejos. La presencia invisible de Jesús, con la que lo relacionan las Escrituras, ya comenzó. La Atalaya y otras publicaciones de los testigos de Jehová han suministrado muchas veces pruebas bíblicas de que la presencia de Cristo comenzó en el año 1914. ¿Cree usted realmente que hay "prueba bíblica" de que Jesús vino "de manera invisible" en 1914?. ¿Sabe que en tiempos de Russell y Rutherford se afirmaba que existía esa misma prueba bíblica de que dicha "presencia invisible" de Jesucristo había ocurrido en 1874 y que 1914 era el año en que habían de desaparecer los gobiernos terrestres? Eso lo enseñaron los Estudiantes de la Biblia durante décadas con la misma rotundidad con la que hoy se dice que hay prueba bíblica de la presencia invisible de Jesucristo ocurrida en 1914. Desengáñese. Jesucristo no ha regresado aún. Cuando lo haga será patente para todos y será para hacer juicio. ¿O cree que carece de importancia enseñar cualquier cosa por la única razón de que sea la Sociedad Watch Tower su fuente? La responsabilidad es siempre personal y no se puede trasladar a otros, ni a un colectivo. Me permito recordarle que "las ideas equivocadas" han sido "doctrinas" con apoyo bíblico "indiscutible" hasta que, generalmente, el tiempo las ha probado falsas. En su día, nadie podía ponerlas en tela de juicio so pena de expulsión. ¿Es ese el alimento suministrado al tiempo debido? ¿Es ese el paso al que uno debe acomodarse? En todo caso, sí revela fielmente la trayectoria recorrida por la Sociedad Watch Tower. 5.- "Les aconsejo que sepan esperar en Jehová sin impacientarse". Perfecto. El deseo por mi parte es que algún día llegue a hacer el esfuerzo necesario por desprogramarse y exprese de verdad lo que su persona real lleva de propio y no de indoctrinado. Que sea patente que acepta el mensaje bíblico por auténtica convicción en plena libertad. En ese caso será más fácil distinguir que sus convicciones religiosas responden a algo personal y no a un proceso de persuasión continua que le impide escuchar otras voces que le ayudarían a que usted hiciera propio el mensaje cristiano mediante la consideración de la Palabra de Dios. Reciba mi aprecio sincero S. R. Nota de la Dirección Si conoce a algún Juan Atalayado, y considera que el contenido de esta carta le puede ser útil y beneficioso, con gusto le autorizamos a que haga copias de ella y la envíe al mencionado, citando de su procedencia si es menester, siempre con el ánimo de ayudarle a ver "el otro lado de la cuestión", y con el deseo expresado por el Autor al final del artículo.